Las raíces.
Sacarosa (15-20%). Pigmentos, fundamentalmente betaína. Colina, glutamina. Vitaminas A, B, C. Sales minerales. Saponósidos. Fitoestrógenos.
Remineralizante, vitamínico. El uso fundamental de la remolacha es la obtención de sacarosa, edulcorante y excipiente de jarabes, tabletas y otras formas galénicas. Además presenta una acción hepatoprotectora e hipolipemiante, similar a la alcachofera. Vasoprotector capilarotropo.
Hepatitis, cirrosis, colecistopatías, prevención de la arteriosclerosis. Anemia, astenia, convalecencia. Fragilidad capilar.
Litiasis oxálicas. Hiperestrogenias. Hipotiroidismo (ver precauciones).
La remolacha contiene glucosinolatos. Aunque no se ha descrito como efecto secundario de la remolacha, muchos glucosinolatos ejercen sobre el hombre una acción antitiroidea, inductora del bocio. Por ello recomendamos no prescribir tratamientos prolongados.
* Uso alimentario.
* Jugo fresco: 100 ml una o más veces al día.