El Áloe ha sido utilizado desde antiguo en medicina como purgante y también como tónico. Los griegos y los romanos pensaban que el áloe era bueno para estimular el flujo biliar con el fin de curar los trastornos abdominales. En la primera parte del siglo XX, el áloe se utilizó con frecuencia como purgante. El remedio homeopático fue probado por primera vez en 1864 por Constantine Hering.
Diarrea
Nombre vulgar Áloe.
Fuente Crece en el sur de África.
Partes utilizadas Resina en polvo. La resina se elabora a partir del jugo desecado.
Este remedio se utiliza para tratar la congestión, sobre todo de los órganos de la pelvis, el abdomen y la cabeza; por ejemplo, el prolapso menor de útero, los problemas prostáticos, el estreñimiento y los dolores de cabeza. También resulta útil en los casos de diarrea con micción dolorosa provocada por intolerancia a los alimentos. Es un remedio común para personas que llevan una vida sedentaria, sobre todo los ancianos y quienes sufren fatiga.
El Aloe también es útil para aquellos que han bebido demasiado alcohol, sobre todo cerveza.
Los síntomas mejoran Con el clima frío; con compresas frías; con la flatulencia.
Los síntomas empeoran En el verano; con clima seco y cálido; a primeras horas de la mañana; con la comida o la bebida.
Ver tipo constitucional Aloe